Ideas

La concepción de ideas es el núcleo de la innovación. A la mayoría de las empresas no les resulta difícil concebir ideas, pero gestionarlas sí. Sciforma ayuda a hacer frente a este reto con su función de gestión de ideas, que incluye las herramientas necesarias para guardar, evaluar y analizar ideas de tal manera que se promuevan y desarrollen las más adecuadas, que, con suerte, se convertirán en la base de un proyecto, producto o programa con éxito.

Las ideas pueden surgir en distintos lugares. Aunque en los entornos más tradicionales solo se tienen en cuenta las ideas que vienen de la dirección, los negocios más orientados hacia los productos se han dado cuenta de que las ideas relevantes pueden surgir en cualquier nivel del proceso de producción. Sin embargo, la comunicación oral no basta para estar seguros de que todos los que tienen capacidad de decisión están al tanto de la concepción de dichas ideas.

Por esa razón, tener una herramienta que permita guardar ideas y esté disponible para cualquier usuario es importante para estimular la innovación.

En función de la empresa, se pueden encontrar distintos tipos de ideas. A continuación presentamos algunos ejemplos:

  • Ideas de producto: Llevan a nuevos productos que suelen parecerse a otros actuales pero tienen características que se adaptan a un nuevo mercado, lo que resulta en un aumento de la diferenciación de precio y la competitividad.

  • Ideas de aplicación: Permiten descubrir nuevos mercados en los que vender un producto existente, lo que resulta en un aumento del el potencial de ventas.

  • Ideas de mejora: Ayudan a aumentar las ventas.

  • Ideas de extensión de gama: Lanzar una nueva línea de producto, bastante similar a la actual para que se tenga en cuenta la experiencia de la empresa.

  • Ideas innovadoras: Abren un nuevo mercado en el que actualmente no hay competidores.

  • Ideas de proceso: Mejoran el proceso o las operaciones para reducir costes, aumentar márgenes o acelerar la producción.

  • Ideas de marketing: Aumentan la base de clientes, mejoran la percepción de la marca y la lealtad de los clientes.

  • Ideas experimentales: Responden a observaciones implícitas o explícitas de los clientes.

Una vez que se han aprobado las ideas, desarrollar un caso de negocio es un paso esencial que, sin embargo, muchas veces se ignora o al que se presta menos atención. Tomar decisiones eficazmente gracias a un análisis adecuado basado en un caso de negocio puede ayudar a una empresa a validar un concepto y decidir si se alinea con su estrategia.